El escriba, de Robert y Shana ParkeHarrison

El escriba, de  Robert y Shana ParkeHarrison
"Un libro debería ser un hacha para romper el mar congelado en nuestro interior" "¿Por qué la gente del futuro se molestaría en leer el libro que escribes si no les habla personalmente, si no les ayuda a encontrar significado a su vida?" J.M. COETZEE ("VERANO")

8/1/09

Oscar y Mamie Rose (fragmento)

Querido Dios:
Me llamo Oscar y tengo diez años. Le he prendido
fuego al gato, al perro, a la casa (creo que
también pasé por la parrilla a los peces rojos) y
ésta es la primera carta que te escribo porque,
hasta ahora, no he tenido tiempo por culpa de
mis estudios.
¡Ojo! Te aviso ames de empezar: me da
mucho palo escribir. Sólo lo hago porque realmente
no tengo más remedio. Es que eso de
escribir es como poner pompones y guirnaldas y
floripondios y echar sonrisitas. Escribir no es
más que mentir para hacer bonito. Es un rollo
de los mayores.
¿Que no te lo crees? Pues mira, fíjate cómo he
empezado la carta: «Me llamo Oscar y tengo diez
años. Le he prendido fuego al gato, al perro, a la
casa (creo que también pasé por la parrilla a los
peces rojos), y ésta es la primera carra que te escribo
porque, hasta ahora, no he tenido tiempo por
culpa de mis estudios.» Pero también podría
haber puesto: «Me llaman Cabeza de Huevo,
aparento siete años, vivo en un hospital porque
tengo cáncer y nunca te he dirigido la palabra
porque ni siquiera creo que existas».
Lo que pasa es que si pongo eso, te va a dar
mal rollo y todavía te vas a interesar menos por
mí. Y yo necesito que te intereses por mí.

(fragmento)



Eric-Emmanuel Schmitt

(Ediciones Obelisco)

He aquí las cartas que escribió a Dios un niño de diez años enfermo terminal de leucemia. Las encontró Mamie-Rose, la dama rosa que va a visitarlo al hospital de niños. Describen doce días de la vida de Oscar, doce días originales y poéticos, doce días llenos de personajes divertidos y conmovedores.
Estos doce días serán quizá los últimos pero, gracias a Mamie-Rose que establece un fuertísimo lazo de amor con Oscar, serán días de leyenda.
Eric-Emmanuel Schmitt (1960) es el autor de teatro francés más representado en Francia y en el extranjero. Sus obras se han estrenado en más de 30 países. Este breve relato, gran éxito teatral en Francia, forma junto con Milarepa y El Señor Ibrahim y las flores del Corán la Trilogía de lo Invisible.
"Eric-Emmanuel Schmitt" nos brinda un prodigioso cuento metafísico sobre el sufrimiento y la cobardía, un cuento para reconciliar el materialismo con la fe, para hacer comprender a todos los que dudan que la enfermedad es como la muerte. Es un hecho, no un castigo. Audaz y harto más eficaz que una tesis o un bello discurso.
Un libro luminoso, unos instantes de ternura, un himno a la vida, una batalla ganada contra la muerte.

Si fructifica, pronto habrá una gran sorpresa respecto a este texto.

5 comentarios:

Daniel Yanez-Gonzalez dijo...

Querido Dios:

Me llamo Oscar
y Tú no eres...
mi querido.

Paz.

Daniel.

Anónimo dijo...

He leído este fragmento y estoy impaciente por ver la sorpresa.......SUERTE!

EVA

Baco dijo...

Daniel:
Te sorprenderías si leyeras éste libro. Puede no parecer lo que parece. Y más si se leen los tres libros de la trilogía de lo invisible.

Eva:
A ver, a ver, un poco de paciencia...

Anónimo dijo...

ola
esta muy reke tebien
el librito para la asignatura religion popbre nene de cancer muere....

Baco dijo...

Te digo lo mismo que a Daniel: hay que leerlo para luego dar una opinión.
Seguramente llegaremos a la misma conclusión: no existe Dios (no ese que entendemos por Dios).
Por lo demás, no suelo cachondearme de las desgracias ajenas. Me da yuyu.