El escriba, de Robert y Shana ParkeHarrison

El escriba, de  Robert y Shana ParkeHarrison
"Un libro debería ser un hacha para romper el mar congelado en nuestro interior" "¿Por qué la gente del futuro se molestaría en leer el libro que escribes si no les habla personalmente, si no les ayuda a encontrar significado a su vida?" J.M. COETZEE ("VERANO")

30/9/09

Versificando a Neuman


Nos lavamos las manos.

Nos lavamos las manos.

Desde el estallido de la gripe

A,

no dejamos de lavarnos las manos.


Al fin nuestras costumbres

coinciden

con nuestros principios.




***********




La mayor preocupación

política

ante la gripe

no es sanitaria,

sino económica.


Paseo por las calles disponibles,

temerosas.

Pienso en los paisajes apocalípticos

Plop de Rafael Pinedo o

El año del desierto de Pedro Mairal.


Cines, teatros,

librerías y tiendas

están semivacíos.

El pánico ha disuadido a los clientes.


Súbitamente

queda muy clara la relación

entre autoridad

y mercado:

el consumo

depende

del orden.




Cono Sur, "mon amour" (diario de viaje de Andrés Neuman en su gira presentación de El viajero del siglo, premio alfagura 2009)




Foto de Andrés capturada del blog de mi amiga Valeria Tittarelli. Gracias.

29/9/09

"Hablando de leyendas", más que un poemário

Presentación en Fuenlabrada
de un poemario único
en el que intervienen dos buenos amigos:
David González y Antonio Díez.



"Hablando de Leyendas:

poemas escritos por brigadistas internacionales de las Islas Británicas..."

sábado, 03 de octubre de 2009

19:30 h.

CASA REGIONAL (Antigua casa de la cultura)

C/ Honda, 29 (Fuenlabrada)

26/9/09

ÁFRICA


ÁFRICA

Nos queda la arena,
los dorados rayos del sol,
la breve espuma de cada ola.

Nos queda el recuerdo salado,
las fotos en sepia,
la amargura de la separación.

Nos queda África.


© BACØ 2009

21/9/09

Un poema de Antonio Crespo Massieu


ALGUNAS PRECISIONES
(EN FORMA DE CARTA)


Señor Presidente
ya es hora de deshacer
al menos
(entre otros muchos)
un grave equívoco
Usted
dice gustar la poesía
retener versos en la memoria
sentir el sosiego solaz
y perenne incitación
que proporcionan siempre los clásicos
(como quien dice valor seguro
en términos de mercado)
y aún con frecuencia
(eligiendo con prudencia y tino)
los modernos nuestros contemporáneos


Si esto es cierto
y abundan motivos para creerlo
(lo afirman todos sus hagiógrafos)
aquí hay
Señor Presidente
al menos
un grave
un gravísimo
equívoco


La poesía
créame usted
es rigor
palabra exacta
pesa y sopesa
uno a uno
los vocablos
aquilata cada pausa
lo dicho lo apenas nombrado
incluso el silencio
cada letra cada mínimo signo
créame usted
Señor Presidente
es cuestión de conciencia
y en ello le va la vida
el mundo
a cada poeta


Nada debe faltar
o sobrar
pues el poema
no es cosa de adorno
barata ternura o sentimientos de alcanfor
Aquí
la palabra
hiere traspasa
se hace carne
respira y tiembla
por eso permanece
vence al tiempo
nos convoca a través de siglos
No es cosa de juego
(aunque pueda ser un juego)
ni tan siquiera adormidera
un revolar de hipidos
o un lánguido fru fru


Señor Presidente
créame usted
un poeta o un lector
uno cualquiera entre miles
jamás equivocaría hasta tal punto
jamás traicionaría hasta tal punto
jamás ensuciaría hasta tal punto
las palabras
Por ellas vive
a ellas se debe
son fidelidad y sustento
y esto
créame usted
es ante todo una cuestión de conciencia


Usted
Señor Presidente
ha escogido sus palabras
conflicto ayuda humanitaria daño colateral
ha decidido nombrar así
lo que cualquier poeta cualquier ciudadano
casi cualquier niño o niña llama
guerra destrucción barbarie asesinato
Y estas palabras
Señor Presidente
lo sabe el más torpe de los poetas
(y son casi legión
lo atestigua quien esto escribe)
y aún el más reciente de los lectores
no son intercambiables
La distancia entre ellas
es la que media
entre la decencia y la ignominia
entre la poesía y el crimen
Y créame usted
Señor Presidente
esta distancia
es un abismo


Usted
Señor Presidente
ha escogido
sus palabras


No se confunda
serán las suyas
nunca las nuestras
serán las del crimen
nunca las de la poesía


De su libro "En este lugar" (Fundación Kutxa, Donostia- San Sebastián, 2006) que obtuvo el “Premio de Poesía Kutxa Ciudad de Irún” 2006.


El sábado disfruté de una lectura memorable en la librería Traficantes de sueños.

Algún asistente preguntó el porqué del adjetivo "crítica".

En fin, vendrán muchas más noches rojas como aquellas Red Box de finales de los setenta.


Foto de Antonio Crespo Massieu extraida del blog Voces y miradas (gracias)

15/9/09

Actividades del Centro Permanente de Poesía Critica, otoño 09

Centro Permanente de Poesía Crítica.

Otoño 2009


Nos alegra comunicaros que ya tenemos nuevas fechas programadas para una nueva serie de recitales dentro del Centro Permanente de Poesía Crítica


En esta ocasión, cada sesión contará con la presencia y la palabra de tres poetas. Además, pretendemos presentar pequeñas proyecciones de poesía visual y poesía escénica. Nuestra intención es continuar ofreciendo un punto de encuentro para voces críticas con el discurso estético e ideólogico cultural y socialmente dominante, un lugar donde poder escuchar versos que no eluden aproximarse a la realidad y sus conflictos.Os pedimos y agradecemos que difundáis en lo posible la convocatoria. Podéis descargaros el programa completo en el PDF adjunto al final de esta noticia y solicitarnos una copia del cartel en formato digital o papel.

Saludos.


(VI): Sábado 19 SEPTIEMBRE - 19 h.

Juan Carlos Mestre, Antonio Méndez Rubio y Antonio Crespo Massieu


Librería Traficantes de sueños.
c/ Embajadores, 35


Juan Carlos Mestre (Villafranca del Bierzo, 1957) ha publicado cerca de una veintena de libros de poesía, como Antífona del Otoño en el Valle del Bierzo (Rialp, 1986), Las páginas del fuego (Letra Nueva, 1987), La poesía ha caído en desgracia (Visor, 1992), La tumba de Keats (Hiperión, 1999) y La casa roja (Calambur, 2008).También destaca la antología de su obra Las estrellas para quien las trabaja (Lucerna, 2001).Igualmente, es artista visual, ámbito por el cual ha expuesto en Europa y América y ha editado varios libros, como Cuaderno de Roma (Ayuntamiento de Málaga, 2005).


Antonio Méndez Rubio (Fuente del Arco, 1967) es profesor de Comunicación Audiovisual y Periodismo en la Universidad de Valencia. Ha escrito los poemarios Llegada a Dublín (Universidad de Valencia, 1988), Fugitivo tesoro (Carabelas, 1993), El fin del mundo (Hiperión, 1995), Un lugar que no existe (Icaria, 1998), Trasluz (Calambur, 2002), Por más señas (DVD, 2005), Razón de más (Igitur, 2008). Parte de su producción ha sido recogida en el volumen Todo en el aire: Poesía 1995-2005 (Editora Regional de Extremadura, 2008).Además, es autor de los libros de estudio crítico Encrucijadas: Elementos de crítica de la cultura (Cátedra, 1997), Poesía y utopía (Episteme, 1999), La apuesta invisible: Cultura, globalización y crítica social (Montesinos, 2003), Perspectivas sobre comunicación y sociedad (Universitat de València, 2004), Poesía sin mundo: Escritos sobre poética y sociedad 1993-2003 (Editora Regional de Extremadura, 2004) y La destrucción de la forma : y otros escritos sobre poesía y conflicto (Biblioteca Nueva, 2008).


Antonio Crespo Massieu (Madrid, 1951) es licenciado en Filosofía y Letras y Diplomado en Estudios Portugueses. Ejerce de profesor de literatura española en Enseñanza Secundaria.Se han editado sus poemarios Acaso revelación, En este lugar (Fundación Kutxa, 2004), Orilla del tiempo (Germania, 2005) y Elegía en Portbou. Además, su libro de relatos El peluquero de Dios (Bartbely, 2009). Ha publicado la antología comentada Una mano tomó la otra. Poemas para construir sueños (Comunidad deMadrid, 2002), junto a Pedro Hilario, Roberto Bravo y Fernando Cañamares.Desde 1997 es responsable de las páginas literarias de la revista Viento Sur, de cuya redacción forma parte.


14/9/09

SELIN de Blanca


Antonio Ubero y Alfonso García-Villalba Martínez han logrado sacar adelante un proyecto ilusionante que ojalá perdure en el tiempo.
Se trata de unas jornadas de literatura independiente y edición en la que participan un buen número de amigos de esta bitácora. Allí estarán Carlos Salem, José Ángel Barrueco, Javier Das, Oscar Esquivias, Marcus "Casimiro Parker", Poli G. Navarro...
Será en Blanca (Murcia), y se celebrará entre el 28 de septiembre y el 4 de octubre próximos. Allí acudirá una nutrida representación de las editoriales y autores independientes más reconocidos de toda España, quienes compartirán sus experiencias, debatirán sobre las realidades y retos a los que se enfrentan y mostrarán a los ciudadanos sus novedades, en un encuentro abierto y participativo en el que no faltarán muestras del genio narrativo, poético, dramático y ensayístico dentro de un ambiente festivo en el que el público será uno de los grandes protagonistas.
A partir de la tarde del jueves 1 de octubre y hasta el mediodía del domingo 4, abrirá sus puertas una feria del libro independiente en la que estarán presentes las editoriales participantes a lo largo de estas jornadas.
Si pincháis sobre la imagen encontraréis el programa de actividades, y las editoriales y autores que participan.

"MIL SOLES ESPLÉNDIDOS":Debate literario en Jerez de la Frontera


10/9/09

Fragmentarias: nueva propuesta poética

Martes, 15 de septiembre
20:00 horas
Sala Triángulo, Madrid



Ediciones Amargord presenta su nueva colección de poesía 'Fragmentaria', dirigida por el poeta Luis Luna.


Los libros elegidos por este poeta para la colección seguro tendrán como lugar común la calidad de los textos (y está mal que yo lo diga, jajaja, pero me refiero a su labor de selección).





Comienza por seis títulos. Utilizando el mismo orden del cartel publicitario son los siguientes:





'Casa de aire', de Francisco Cenamor


(http://franciscocenamor.blogspot.com/)





'Apuntes para un génesis', de Ana Martín Puigpelat(http://www.poemariodemujeres.com/M/MartinPuigpelatAna.htm)





'El cuerpo a su imán', de Sonia Betancort


(http://soniabetancortsantos.blogspot.com/)





'A la vendimia en Portugal', de Agustín Calvo Galán


(http://visualpoetry.blog.com.es/)





'Pequeñas conversaciones', de Rafael Saravia


(http://www.rafaelsaravia.es/)





'La habitación del extranjero', de Óscar Aguado


(http://www.edicionesamargord.com/oscar.html)

7/9/09

Teatro, by Zena

Un magnífico actor y poeta del sur de Madrid, Francisco Cenamor, emprende un nuevo proyecto teatral. Hemos colaborado juntos en una adaptación dramatizada de un texto de Eric-Emmanuel Schmitt y puedo aseguraros que tiene mucho que enseñar.




Ya está abierta la matrícula de los cursos de teatro que imparte Francisco Cenamor. Este año se impartirán en un nuevo centro, el Estudio de danza Patricia Doménech (C/Jeromín, 20. Leganés, zona centro).

Curso de iniciación
Durará de octubre a junio y será los martes y viernes de 20,30 a 22,30 horas. Su precio es de 65 euros mensuales. Solamente se ofertan 10 plazas. Más información: http://cenamoractor.blogspot.com/2009/06/curso-regular-de-iniciacion-al-teatro.html

Taller para montar una obra teatral
Durará de octubre a junio y será los sábados de 12 a 14 horas. Su precio será de 40 euros mensuales. De momento solamente se ofertan 10 plazas. Más información: http://cenamoractor.blogspot.com/2009/06/taller-para-montar-una-obra-de-teatro.html

El plazo de inscripción terminará el 28 de septiembre.
Para información e inscripciones:
teléfonos 625 096 356 o 912 883 743.
correo: escueladeteatrocenamor@gmail.com

Suerte, compañero.

4/9/09

Un poema de Inma Luna


NI NADIE


Nadie me conoce.

Ni mi psiquiatra.

Ni la alcachofa de la ducha.

Ni mi taza de café.

Ni mis pestañas.

Nadie sabe nada de mí.

Nadie me ha descubierto todavía.

Ni mis sujetadores.

Ni mis bragas.

Ni mi pinza de depilar.

Nadie se asoma a mis zonas estrechas.

Nadie sabe encontrarlas

Nada me araña.

Ni mi cepillo de dientes.

Ni los chicles.

Ni los vasos de leche desnatada.

Nada entra en mi cuerpo.

Todo lo cruza.

Todo pasa de largo.

Como el viento en las casas con dos puertas.

Nada se lleva nada.

Nadie.



(De Nada para cenar, LFC Ediciones, Béjar. 2005)

1/9/09

Poemario del mes: Azken Bala / La última bala, de Hasier Larretxea


AKEN BALA / LA ÚLTIMA BALA
De Hasier Larretxea
Traducción: Ángel Erro
(Ed. Point de Lunettes 2008)

Por María Jesús Silva

Hasier Larretxea nos muestra en este poemario bilingüe el deseo de ser todos en uno para luchar y vencer. Unir las palmas de las manos y los corazones, sin que haya de por medio un solo vencedor que se cobre con las balas mil y una vida.

El poemario se divide en cuatro partes:
La primera lo abre un solo poema: ‘Usaré hoy mi última bala’.
La segunda: Ecuaciones de teorías revolucionarias.
La tercera: Jugando a la praxis del tiroteo.
La cuarta: La última bala.
Prácticamente todo el poemario utiliza la voz de la primera persona para desarrollar los poemas. Aparece también la segunda persona del singular y del plural, en menor medida.

Ejs:

Pág, 71.

No uses más esa pistola.
No apuntes.
No derrames más sangre. (...)

Pág, 89.

Hemos estado en tantas manifestaciones. (...)
Después de todo esto
sólo nos queda la leve sensación
de haber perdido el tiempo.

Con estas voces crea una duplicidad entre la conciencia y la necesidad de respuestas que aparece en todo el poemario.
Las figuras retóricas que aparecen en el libro son fundamentalmente las de pensamiento descriptivo:
La topografía, aparece de una forma indirecta en todo el poemario. Nos describe calles, ambientes por los que el poeta va recogiendo escenas que transforma en versos.
El retrato, nos describe las cualidades morales y físicas de un individuo.

Ejs:

Pág, 57.
Me considero un revolucionario.
He iniciado cinco o seis huelgas de hambre.
He quemado muchos cajeros automáticos.(...)

Pág, 75.
La apariencia no es más que una imagen
para poner fronteras ante el otro,
para definir claramente dónde está la raya,
para asentar las diferencias.(...)

Pág, 79.
No puedo dejar de llorar.
Y si por cada muerto
lloro,
espérame sentado.

Que llegará el diluvio.

Pág, 80.
Voy buscando mi conciencia particular.
Ese espíritu de libertad.(...)

La enumeración, existen varios poemas en los que los elementos componen un conjunto.
Ejs:

Pág, 25.
Lo extraño no es perder.

No perder
una pierna,
un familiar,
un amigo,
un amor.(...)

Pág, 55.
(...) Así,
no tiene sentido
ni el crepúsculo,
ni el sueño,
ni aprender a andar en bici,
ni tomar chocolate caliente,
ni yacer contigo desnudo,
ni cualquier canción de Jens Lekman.

Ni creer en algo.(...)

Pág, 80.
(...) Y no,
no necesito
ni guías,
ni mapas,
ni dogmas,
ni doctrinas.(...)

Pág, 81.
Quema un autobús.
Quema un cajero.
Quema una papelera.
Quema todo un barrio.
un pueblo, una ciudad.(...)

Las figuras de pensamiento lógicas también aparecen en el poemario, como la máxima o sentencia que ofrece una reflexión de carácter filosófico sobre la vida o el mundo, el poeta incluye dentro de esta máxima un epifonema resultado o resumen de las afirmaciones anteriores.
Ejs:

Pág, 25.
(...)Lo extraño no es perder.
Y con eso ganar algo.
Sacar provecho.
Con algo.
Con alguien.

No cagarla con todo esto.

Pág, 27.
(...)Yo no elegí esto.
No elegí nacer.
Y menos aquí.
Mejor, si no supieras mi secreto.
No sé por qué,
pero me querrías más.
¿Me pagarías veinte euros más
por acostarte conmigo?
¿Eso arreglaría algo?
¿Acabarían todos los conflictos?

Pág, 35.
(...)Yo también quiero ser un héroe.
Un héroe, como todo, politizado.
No sé qué pensar, no sé qué decir.
Que me he cansado.
Qué me tenéis cansado con ese discurso(...)

Pág, 46.
No hay secretos.
Sólo controles y asesinatos.
Detenciones e impuestos revolucionarios.
No hay secretos.
Y menos en el País Vasco.

Pág, 76.
(...)Me importa una puta mierda
lo que digan los dinosaurios del clan.
lo único que me mueve es la controversia.


La antítesis o contraste, enfrentar dos pensamientos opuestos, también la une a la paradoja, pensamientos que parecen irreconocibles.

Ejs:

Pág, 67.
Construyamos un pueblo
haciendo explotar tres o cuatro bombas diarias
en cascos históricos.

Construyamos un pueblo
embelleciendo con pintura roja y amarilla
y con escritos amenazantes
las sedes de los partidos políticos.

Construyamos un pueblo,
pero quememos antes
sus cajeros automáticos,
sus autobuses.

Construyamos un pueblo,
aunque para ello
tengamos que destruirlo todo.

Aunque ya no nos quede
sobre qué construir.

Pág, 95.
Aprovecho mi última oportunidad.

Porque la palabra tiene tanta fuerza como una bala.

Ahora es tu turno.

A pesar de que yo muera,
este poemario sobrevivirá.
Este poemario será mi heredero.
Mi recuerdo.

Me puedes matar,
pero nunca asesinarás,
nunca destruirás la poesía.

Porque la palabra permanecerá en el tiempo.

¿Y la violencia?

En todo el poemario aparecen también las figuras de pensamiento indirecto como la ironía, que afirma lo contrario de lo que se dice, y el sarcasmo, ironía aplicada de forma crítica al comportamiento, gesto o actitud de las personas.

Ej:

Pág, 87.
Pensemos algún eslogan atractivo,
algo novedoso que pueda
servir para la construcción Nacional.

Pensemos algún eslogan encantador,
casi un estribillo bailable,
ya sabes, con la típica música de trikitixa,
uno que podamos pronunciar al unísono.

Pensemos algún eslogan original,
juntemos palabras antes no usadas,
una frase que demuestre que estamos
abiertos a este nuevo siglo.

Pensemos algún eslogan. O más de uno.

Aunque para eso hará falta un motivo.

El poemario está repleto de preguntas retóricas, directas e indirectas. Expresan sentimientos que no esperan respuesta.

Ej:

Pág, 72.
Quiero saber por qué aplastas así
la pasta de dientes.
Necesito conocerte de alguna manera.
Saber si eres parte de la organización.
Habrá alguna manera...
Para dar con la solución.
Para despejar la ecuación.

Aparece también la anáfora, repetición de una o más palabras al principio del verso.

Ej:
Pág, 43.
(...)He perdido la confianza.
Perder, he perdido casi todo.
Te he perdido a ti y a mi mitad.
He perdido lo que fui.

Dime,
¿qué me queda?

Los tiempos verbales más empleados son el presente y el imperfecto, combinados con un gran número de adjetivos descriptivos para dotar los poemas de esa actitud sensorial que encontramos en la mayoría de ellos.

Es un poemario que no contiene metáforas. Quizá el deseo que lleva implícito que la batalla acabe sea en sí una metáfora que ocuparía la totalidad del libro.

Opinión personal:

Opinión personal:Es un poemario valiente, de ideas lúcidas y dando una vuelta más, para ir un paso por delante de los que pretenden acallar, pisar y rematar a los que tienen vida, voz, ideas y sentimientos diferentes a los que unos descerebrados intentan mantener como ideales y establecer como norma.
Hasier Larretxea no esconde nada y lo hace en euskera y en castellano, sus dos lenguas, para llegar a todos, plantando cara a los que quieran pisarle la voz. Hay mucha verdad en este libro, verdad que algunos esconden y otros no quieren ver. Es un libro que llora y revienta ‘cajeros’, ‘coches’ y corazones que siguen destilando sangre en cada calle, en cada paso, en cada ventana cerrada y casa abandonada. La última bala hiere a corta distancia, descerraja una historia que ya no tiene sentido, la que pide razones y exige una paz necesaria para mostrar que nos una a todos y acabe con las balas. Todos deberíamos luchar para unir y que nuestras balas estuvieran hechas de palabras altas, libres, claras y sin miedo.


Ez dago garailerik ez heroirik.
Amore emateko inor ere ez.
Ongietorri aurreskua dantzatzerik ez eska.
Nik ez dut inor hil.
Ez torturatu,
ezta mehatxatu ere.
Nahiz pistolaz,
nahiz atxiloturik,
nahiz gorbatadun,
inor ez dago hondamendiaz,
basatikeriaz,
gizaki izatearen ankerkeriaz libre.

No hay vencedores ni héroes.
Nadie ante quien claudicar
No me pidas que baile un aurresku de bienvenida.
Yo no he matado a nadie.
Tampoco he torturado, ni amenazado.
Aunque con pistola,.
aunque detenido,
aunque con corbata
nadie está a salvo de la catástrofe
De la barbarie.
De la atrocidad de ser humano.



Erre ezazu autobusa.
Erre, kutxazain automatikoa.
Erre, zaborrontzia.
Erre ezazu auzo guztia.
Herria, hiria.
Basoa.

Su horretan zu erre baino lehen.
Quema un autobús.
Quema un cajero.
Quema una papelera.
Quema todo un barrio.
Un pueblo, una ciudad.
Un bosque.

Antes de que también tú te quemes en ese fuego.
AZKEN BALA
Azken aukera baliatu dut.

Hitzak baduelako bala batek haina indar.

Zure txanda da orain.

Nahiz eta ni hil,
poemario honek biziraunen du.
Poemario hau izanen da nire ondorena.
Nire oroitzapena.

Hil nazakezu,
Poesia baina,
ez duzu nehoiz ere erailko.
Suntsituko.
LA ÚLTIMA BALA
Aprovecho mi última oportunidad.

Porque la palabra tiene tanta fuerza como una bala.

Ahora es tu turno.

A pesar de que yo muera,
este poemario sobrevivirá.
Este poemario será mi heredero.
Mi recuerdo.

Me puedes matar,
pero nunca asesinarás,
nunca destruirás la poesía.
Porque la palabra permanecerá en el tiempo.

¿Y la violencia?


Azken Bala / La última bala
de Hasier Larretxea
(Editorial Point de lunettes, 2008)

El valor de la palabra
(Palabra de poeta),
por Esteban Gutiérrez Gómez

La poesía
puede obligar
a cambiar
el mundo
Gabriel Celaya



En las últimas entradas del “poemario del mes” les hemos mostrado algunos autores que, más allá de su propuesta lírica, pretenden cambiar el mundo con su palabra. Dos ejemplos recuerdo claramente: Ángel Guinda y su proyecto de amor como motor del cosmos en “Toda la luz del mundo”; y J. Jorge Sánchez que en su “Filosofía de la minucia” propone un nuevo orden educativo para llegar en verdad a la igualdad de sexos demostrando que ha sido la mala educación (y la filosofía que la ha fundamentado a lo largo de la historia) la principal causante del abismo.
En esta misma línea de palabra-poder habría que incluir el poemario de este mes de septiembre: “Azken Bala / La última bala” de Hasier Larretxea.

A todos aquellos que decidimos bebernos el poemario nos ha sorprendido su propuesta. Con versos aparentemente sencillos (lo que cuesta elaborar versos aparentemente sencillos sólo lo saben los autores) dotados de una contundencia extrema, con una voz diferente y valiente, con el sonido a música étnica de sus versos en vascuence, golpea a un lado y a otro (violencia etarra y estado policial) en busca de la libertad que todo ciudadano necesita respirar, de esa libertad a la que todos tenemos teórico derecho y que es tan difícil de lograr en el País Vasco.

A todo ello se añade la posibilidad de leer los poemas originales del autor escritos en vascuence y su traducción al castellano (viceversa en cinco de ellos, elaborados por el autor directamente en castellano, y que nos ofrecen una clave muy importante para descifrar su estilo y facultades de composición poética).

Lo que ustedes se encontrarán al abrir el poemario y comenzar a leer será una voz diferente, valiente (reitero la novedad y la valentía como valores fundamentales de esta obra) que se dirige en un “tú” personalizado a los aberzales (y no me gusta utilizar este término porque “patriotas vascos” no sólo lo son los del entorno de ETA), a futuros etarras (poemas en páginas 30-31, 48-51, 70-71, 88-89) y a asesinos que creen haber cambiado su vida por un ideal (60-63, ¿y ahora qué?, les dice en este poema, ahora que ya no hay vida), muchas veces de modo desafiante (76-77, 84-85)).

Parte su poemario de los hechos ante los que no se puede esconder la cabeza en la tierra como los avestruces (26-27), de hechos que afirman la barbaridad humana (28-29) ante los que propone, desde el inicio, el cambio de mundo, de escenario, para acabar con el terror en el País Vasco.

Uno de los poemas fundamentales del libro nos ofrece el axioma de la verdadera revolución: ser revolucionario, partidario de la liberación, está de moda (56-57), cotiza en bolsa y se vende en las grandes superficies. Frente a esta revolución consumible, todo el libro ofrece una alternativa: la palabra como medio, como instrumento de paz. Frente a la mafia vasca (58-59) y la filosofía de “tierra quemada” (arrasarlo todo para construir sobre las cenizas, 66-67,80-81) su propuesta de paz (72-73), de igualdad en la desnudez (66-67) como metáfora de las personas de bien para no llegar a diferenciarnos con la muerte (78-79), la muerte en vida del que traspasa la línea y se convierte en un asesino, la muerte del inocente vendida en el mercado político.

Hasier denuncia el sándwich de carne vasco, haciendo de rebanadas de pan la violencia etarra y el estado policial. La carne la pone el pueblo vasco (78-79) deseoso de que todo acabe de una vez y pueda respirar en libertad (esta vez, sin metáfora: poder respirar).

Sí, Hasier es conciente del enquistamiento que priva de libertad a los vascos y ofrece la propuesta: la necesidad de crear un escenario diferente en el que sólo valgan las palabras (86-87), porque todo pasará y se olvidará, menos las palabras (98-97).

Esa es su novedosa y valiente propuesta para cambiar la realidad vasca, dirigida esta vez a quienes utilizan las pistolas como único argumentario imponible. No, no es cuestión de balear más, es cuestión de que la palabra vuelva a tener ese valor, de que el mismo pueblo vasco sea el que conquiste su libertad y pueda vivir sin terror, sin miedo a unos y a otros.
Estos versos mínimos, a veces repetitivos, contundentes, utilizan la forma del instrumento punzante con el que están realizados para llevar al lector un mensaje de paz.
Que la última bala, la definitiva, sea la palabra.