El escriba, de Robert y Shana ParkeHarrison

El escriba, de  Robert y Shana ParkeHarrison
"Un libro debería ser un hacha para romper el mar congelado en nuestro interior" "¿Por qué la gente del futuro se molestaría en leer el libro que escribes si no les habla personalmente, si no les ayuda a encontrar significado a su vida?" J.M. COETZEE ("VERANO")

4/8/08

David González: El demonio te coma las orejas

Acabo de leer este poemario de mi amigo David González. El demonio te coma las orejas (Asociación Cultural Crecida, Ayamonte, Huelva) contiene historias de su paso por el talego publicadas en 1997. Jodidas historias de dentro y de fuera.


Colgaré tres poemas que muestran el buen hacer de David ya por aquellos años, pero os tengo que decir que el primero podría ser mío, autobiográfico, un auténtico poema de no ficción, que me hace pensar en el Fulos, en Pepote, en el Moro, y en toda aquella banda que a finales de los setenta y principios de los ochenta formábamos el panteón de dioses más salvaje de Madrid.


Los más atrevidos pasaron del humo azul y los tripis al azúcar moreno en unos meses y, ahora, ninguno de ellos está aquí.



MATIZ DE REGENERACIÓN

Todos mis colegas de entonces
o están muertos
o están otra vez en el talego
o andan por ahí tirados,
buscándose la vida
como malamente pueden.

Yo no.

Cambié.

Dejé a un lado
esa clase de vida.

Tuve miedo.

Mucho miedo.


CUALQUIER PARECIDO ES PURA COINCIDENCIA

O te cortas el pelo tú
o te lo cortamos nosotros,

y encienden los mecheros
y se descojonan vivos.

O te cortas el tomo tú
o te lo cortamos nosotros,
tú verás colega, tú mismo.

Son cuatro.
Los cuatro hijos de puta
que mandan
en la galería de los menores.
Los kíes.

Forman un círculo a mi alrededor.

¿Qué, julai?
¿Te lo vas a cortar o qué?

Hoy es martes.

Vienen a verme los viejos.
Dentro en el locutorio
y mi madre dice:

¡Te has cortado el pelo!
Menos mal que te dio por cortarlo,
ya parecías un quinqui
con esas melenas.

Esto ya es otra cosa,
dice mi padre.
Ahora ya pareces un hombre.


CERILLAS

Lo habíamos estado hablando toda la noche:

si mañana por la mañana,
cuando nos abran la celda,
si viene alguien,
el que sea,
los que sean,
y empiezan a buscar bronca,
tú ya lo sabes, ¿eh?,
lo que hablamos:
pase lo que pase,
tú y yo juntos,
nada de acojonarse, ¿eh?;
y si tenemos que andar a hostias,
pues andamos,
y si tiran de baldeo,
pues que tiren,
allá ellos,
tú ya lo sabes, ¿vale?,
lo dicho:
pase lo que pase,
tú y yo juntos,
nada de rajarse, ¿estamos?

A la mañana siguiente le sacaron al patio
a hostia limpia, le amarraron
a una columna del tendejón,
le pusieron en los pies periódicos
atrasados, trapos y cartones,
y le enrollaron todo el cuerpo
con papel higiénico
y con la espuma de las colchonetas.

Luego le prendieron fuego.

Las cerillas
las tuve que poner yo.

El demonio te coma las orejas se reeditará próximamente, ampliado y prologado por el escritor José Angel Barrueco.
Baco,2008

3 comentarios:

Kebran dijo...

ESTEBAN, ESE POEMARIO SE VA A REEDITAR CON MUCHAS SORPRESAS
ESPEREMOS SU SALIDA
UN ABRAZOTE
EL KEBRAN
YA HE SUBIDO TU CUENTO A MI BLOG

María Jesús Siva dijo...

Cuando terminé de leer este libro, me cogió un pellizco en el estómago y cada vez que releo sus versos me sigue apretando. Me parece duro, incluso cruel en algunos poemas, pero real y viscoso, esa sensación de la cual no eres capaz de desprenderte, como es la vida dentro de las jaulas, de cualquier jaula, la falta de libertad física y psiquica se convierte en falta de aire, algo que siempre nos oprime.
Espero con ganas esa reedición.
Besos.

Anónimo dijo...

Muy buen libro, agradezco al amigo Barruecos el habermelo enviado.