El escriba, de Robert y Shana ParkeHarrison

El escriba, de  Robert y Shana ParkeHarrison
"Un libro debería ser un hacha para romper el mar congelado en nuestro interior" "¿Por qué la gente del futuro se molestaría en leer el libro que escribes si no les habla personalmente, si no les ayuda a encontrar significado a su vida?" J.M. COETZEE ("VERANO")

4/9/08

FRONTERA

El poeta aragonés Fernando Sarría, en su blog Crepusculario Siglo 21 ha tenido la gentileza de colgar hoy uno de mis poemas: Frontera.
Gracias, Fernando.


Contando la intrahistoria de Frontera, he de decir que fue un poema específicamente escrito para la primera "Estatua Parlante" que se hizo en Fuenlabrada (año 2006 si mal no recuerdo). El motivo impulsor (siempre reivindicativo, como corresponde al orígen de estas estatuas o fuentes parlantes) de la misma, fue la muerte de seis subsaharianos al intentar escalar en Melilla el enrejado de la valla de seis metros que separa el hambre y la miseria de allí, del sueño con un mundo mejor aquí. Murieron colgados y ametrallados en las verjas que protegen de la inmigración "ilegal" este espacio político que llamamos España. Que los que percutieron sus metralletas fueran los policías marroquíes no significa que estemos limpios de culpabilidad.

Hoy, precisamente hoy, al mirar la portada del diario gratuito que ojeo cada mañana al ir a trabajar en el tren, encontré esta noticia: Al menos 120 inmigrantes han muerto en lo que va de año al intentar llegar a España.
Parece mentira que una estrecha franja de mar marque tantas distancias.


Os dejo con un fragmento de Frontera, si queréis leerla completa acudir al blog de Fernando Sarría.


FRONTERA (fragmento)

La única frontera que reconozco
la forman las babas del mar,
la aguamarina sobre la arena,
que va y viene,
que siente la ausencia de la Luna
y el calor del viento.


Y es frontera indefinida,
perdida en bucles efímeros,
en centellas salinas,
en dorados convertidos en pardos,
en húmedos que son mojados y
al instante
ya ni eso,
ya son secos trocitos nacarados
de vulva de mar.


Y nunca sé si estoy aquí o allí,
o si quiero cruzarla o no,
pero ando descalzo buscando jugar con ella
para que no me atrape,
pero dejándome mojar los pies.

2 comentarios:

Tesa Medina dijo...

Donde haya pan y vino, tengo mi hogar…
Canta Serrat

Ni patrias ni fronteras.

Cuando alguien se le ocurrió vallar un trozo de tierra y decir eso es mío, ahí empezó la humanidad a perder el norte.

Precioso poema, Baco, voy a leerlo completo donde habita Fernando.

Me sienta bien Barcelona, me alegro de haber tomado la decisión de regresar.

Un abrazo, y si vienes por aquí, ni se te ocurra no llamarnos.

¿Cómo fue por Londres? Cuéntame cuando tengas un rato.

Baco dijo...

Por Londres, genial. Descubrimos callejeando sitios que no están en las guias, y son los que más recordamos.
Ya te contaré.