El escriba, de Robert y Shana ParkeHarrison

El escriba, de  Robert y Shana ParkeHarrison
"Un libro debería ser un hacha para romper el mar congelado en nuestro interior" "¿Por qué la gente del futuro se molestaría en leer el libro que escribes si no les habla personalmente, si no les ayuda a encontrar significado a su vida?" J.M. COETZEE ("VERANO")

27/5/08

David González: EN CARNE VIVA

Hay libros con los que uno se iría a la Luna.
Uno de esos libros es Algo que declarar, de David González, y me pregunto cuál es la causa de esa fascinación. Será, muy posiblemente, porque la poesía de no ficción que contiene me eriza el vello de la piel, o será porque convergen nuestros sentimientos (los de él al escribir, los míos al leer) como hermanados por una causa común.

No tengo ni idea de lo que contiene En las tierras de Goliat, su nueva propuesta que me está costando encontrar, no sé si David continua con su poesía de no ficción o inventa alguna verdad, pero de lo que estoy seguro es de que como detrás de David no hay nada (él es como es. Punto. No esconde nada) supongo bien al afirmar que todo lo que de este libro se desprenda, al igual que Algo que declarar, lo escribió EN CARNE VIVA.

Por eso titulamos los de ESFERAdeLETRAS así el recital del viernes 30 en Fuenlabrada, porque los allí reunidos nos vamos a mostrar tal como somos, sin una hoja de parra que cubra nuestras (des)vergüenzas.
Nos vemos allí, si queréis, y vuelvo a colgar el cartel del recital.

Muchísimas gracias a todos los compañeros que os habéis hecho eco en vuestras bitácoras (que son muchas). Gracias a:
Y perdón si me dijo a algún amigo sin nombrar.
© Esteban Gutiérrez

22/5/08

BOCADOS ESFÉRICOS: Feria del Libro Fuenlabrada 2008


Esta feria del libro 2008 en fuenlabrada se nos va a oir.


La poesía lo llenará todo.


Hemos invitado a jóvenes poetas que es ahora cuando necesitan que se hable de ellos.

Jóvenes pero valiosos.

Poesía desde las entrañas, poesía proyecto, poesía susurrada, poesía declamada, poesía, poesía, poesía.

Podríamos haber traído a muchos más amigos, todos querían colaborar con nosotros, ya lo sabemos para otro año, ya habrá más oportunidades.






Y el día viernes 30, a las 8 de la tarde, EN CARNE VIVA, un recital en el que la poesía de no ficción (palabras de David González) estremecerá muchas almas.

David González
Ana Pérez Cañamares
Roxana Popelka
Teresa López (Luna)
Gsus Bonilla
Andrés Ramón Pérez (Kebrantaversos)
Ceferino Otálora (Mos)
Luisa Fernández
Pilar Gil
Julián Rodríguez (RRR)
María Jesús Silva (Ada)
Resu Bonilla
Esteban Gutiérrez (Baco)



Si el día 30 estáis por el foro, no os lo perdáis.

Para no solapar cuelgues en el blog de ESFERAdeLETRAS, os dejo alguna muestra del buen hacer de nuestros “toreros” invitados.

Cuando yo era otra cosa diferente a la que soy

jugaba con mi hermana invisible a soñar
algo quimérico. Teníamos pesadillas incoloras en la cama de
un hotel. Hacíamos agujeros
en el techo
en el suelo
en las paredes

contemplábamos cómo era el mundo de otros niños;
entrábamos en su cabeza
pedaleábamos hasta su corazón.

A veces no nos gustaba lo que veíamos;
ni su cara
ni su sonrisa,
o el modo en que
dejaban colgada la ropa
en el radiador.

Los imaginábamos
en silencio, quietos
en una estación, donde no había
trenes
ni barcos
ni televisión.

Cuando yo era otra cosa diferente a la que soy
espiaba en las habitaciones desnudas de cada hotel
y encontraba alhajas brillantes que ataba a la cintura,
o hacía malabares con
medallas de valor.

Cuando yo era otra cosa diferente a la que soy
me tumbaba en la moqueta de ése hotel de Copenhague;
me hacía la muerta un rato,
¡ya está!

me costaba respirar.

© Roxana Popelka (poema inédito)



TODOS
El hambre suele producir
poemas inmortales.
La abundancia, únicamente
Indigestiones y torpezas.
(Hipolito Taine 1928-1893)

una imagen
me viene a la cabeza…
¿recordáis?

esa de un buitre
que sisea al lado
de una escuálida niñita negra
y ésta medio viva
abatida contra el suelo;
porque el hambre pesa como dios.

a veces cuando lo pienso
oigo al buitre
que grazna suave, como un susurro.

entonces los pelos
se me ponen como escarpias
la piel de gallina
y se me humedecen los ojos,
incluso me sonrojo.

te clavaste ahí, entre mis ojos.

estoy convencido de que muchos
tienen miedo como yo; la niña no.

pero sí el ave, el fotógrafo, quien le paga,
quien le premia, y todos aquellos
que se echan las manos a la cabeza
cuando miran, cuando observan, cuando ven.

y es entonces cuando todos
podremos escarbar en nuestras faltas
y sentenciarnos.

© GSUS BONILLA



EN LAS TREMENDAS NOCHES SIN LUZ
PRÓLOGO A MI LETANÍA DE AUSENCIAS
CON LA NADA POR COMPAÑÍA
LAS MANTAS DEL DESARRAIGO ME CUBREN
CAMINO AL ONÍRICO PARAÍSO A BORDO DE MI CAMASTRO
ME SUMERJO EN EL OCEÁNO DE LUNAS. Y NADA TEMO.
SE DESVANECE LA VIDA Y ME CONVIERTO EN VERSO
Y VIAJO. Y SUBO. Y BAJO POR LOS SUEÑOS DEL POETA.
ELEVO LA MIRADA HACIA ESA NADA: EL MANTO SILENCIOSO DE LA NOCHE
Y VERSO:
Y VERSO QUE TE PUEDO ACARICIAR
Y VERSO QUE TE ROBO UNA SONRISA
Y VERSO... ¿DÓNDE VAS? QUE TENGO PRISA
PARA PODER EL VERSO TERMINAR.
Y VERSO CON LA LUZ DE TU MIRADA
Y VERSO CON EL FILO DE TU BOCA
Y VERSO CON EL ALMA ENSANGRENTADA.
Y VERSO, CADA NOCHE, SI ME TOCA”

© Andrés Ramón Pérez (Kebran)


Toda la información en el blog de ESFERAdeLETRAS

14/5/08

Charles Bukowski: No tenemos dinero, tesoro, pero tenemos lluvia

Tesa me dijo que era su poema preferido de Bukowski, y a mí, que no he leído toda la poesía que tenía que leer de él, me parece la hostia.
Para ti, Tesa.

No tenemos dinero, tesoro, pero tenemos lluvia

Llámenle efecto invernadero o lo que sea
pero, simplemente, ya no llueve
como antes.
Recuerdo en particular las lluvias de
la época de la depresión.
No había nada de dinero pero había
mucha lluvia.
No llovía sólo una noche o
un día.
LLOVÍA 7 días y 7
noches
y los sumideros de Los Ángeles
no estaban hechos para tragar tanta
aguay la lluvia caía
GRUESA,
MALVADA y
CONSTANTE
y se OÍA como golpeaba contra
los tejados y en el suelo
cataratas de agua caían desde los tejados
y muchas veces GRANIZABA
gruesos GRANOS DE HIELO
como bombas
que explotaban
y se estrellaban contra las cosas
y la lluvia,
simplemente, no
CESABA
y todos los tejados tenían goteras.
Cacerolas,
pucheros
por todas partes;
goteaba ruidosamente
y había que vaciarlos
una y otra
vez.
La lluvia alcanzaba los bordes de las veredas,
invadía el césped, subía por las escaleras y
entraba en las casas.
Había trapos de pisos y toallas
y la lluvia muchas veces llegaba a los
retretes, burbujeando, marrón, enloquecida,
en remolinos
y los coches viejos estaban en las calles,
coches a los que les costaba arrancar hasta en
días soleados.
Y los hombres que se habían quedado sin trabajo
miraban por la ventana
a sus viejas máquinas que morían
como objetos vivos
allá afuera.
Los desocupados,
fracasados en época de fracasos,
estaban prisioneros en sus casas con sus
esposas, sus hijos
y sus
mascotas,
que se negaban a salir
y dejaban excrementos en
lugares impropios.
Los desocupados se volvían locos
confinados con
sus mujeres, en otro tiempo hermosas.
Había terribles peleas
mientras las notificaciones con desahucio
caían en los buzones.
Lluvia y gritos, latas de porotos,
pan sin manteca, huevos
fritos, huevos duros, huevos
escalfados, bocadillos de
manteca de maní y un pollo
invisible
en cada puchero.
Mi padre, jamás un buen hombre
en el mejor de los casos, le pegaba a mi madre
cuando llovía,
y yo me metía entre ellos,
piernas, rodillas,
gritos
hasta que
se separaban.
"Te voy a matar" le gritaba yo
a mi padre, “si la vuelves a pegar,
te mato".
"Saca a este cabrón
hijo de puta del medio"
"No Henry, quédate
con tu mamá".
Todas las familias sufrían
pero creo que la nuestra
estaba sometida a un terror
mayor que la media.
Y por la noche
cuando intentábamos dormir
la lluvia seguía cayendo
y en la cama
en la oscuridad
al mirar la luna contra
la ventana rajada
que impedía que entrara
la mayor parte de la lluvia
yo pensaba en Noé y en el
Arca
y pensaba que el diluvio
había vuelto,
todos lo
pensábamos.
Y después de pronto
paraba.
Parece que siempre
paraba
a eso de las 5 o 6 de la madrugada,
que paz entonces,
pero no exactamente silencio
porque las cosas seguían haciendo
ping
ping
ping
y ya no había niebla
y a las ocho de la mañana
había una
ardiente luz amarilla
-de un amarillo Van Ghog-
loca, cegadora
y después
los desagües del tejado
aliviados del caudal de
agua
empezaban a expandirse con
el calor
PANG
PANG
PANG
y todo el mundo se levantaba
y miraba afuera,
todo el césped
empapado,
más verde,
y allí estaban los pájaros
sobre el césped
PIANDO como locos,
no habían comido decentemente
durante 7 días y 7 noches
y estaban hartos de
bayas y
esperaban que los gusanos,
gusanos casi ahogados,
salieran a la superficie.
Los pájaros
tiraban de ellos para arriba
y se los echaban garganta abajo;
había mirlos y gorriones,
pero éstos
enloquecidos por el hambre,
más pequeños y más rápidos,
conseguían su
propósito.
Los hombres estaban de pie en sus porches
fumando cigarrillos,
y sabían
que había que salira buscar empleo
que probablemente no
existía, que había que arrancar ese coche
que probablemente no
arrancaría.Y las en otro tiempo hermosas
mujeres
estaban en cuartos de baño
peinándose,
maquillándose,
intentando recomponer
su mundo,
intentando olvidar esa
terrible depresión que
las atenazaba,
preguntándose qué podrían
preparar para
el desayuno.
Y en la radio
nos decían que
la escuela ya había
abierto
y
poco después
allí estaba yo
de camino a la escuela,
enormes charcos en las
calles,
el sol como un nuevo
mundo
mis padres de vuelta en aquella
casa,
y yo llegando a clases
en punto.
La señora Sorenson nos recibió
con un "no tendremos
recreo, como siempre el patio
está demasiado encharcado"
"OHHHH", dijo la mayoría
de los chicos.
"Pero vamos a hacer algo especial
a la hora
del recreo", continuo diciendo
"y va a ser divertido."
Bueno, todos nos preguntábamos
en qué consistiría
y las dos horas de espera
mientras la señora Sorenson
iba impartiendo
sus lecciones
se nos hicieron largas.
Yo miraba a las
nenitas, tan lindas
todas, tan limpias y
atentas,
sentadas quietas y
derechas
y su pelo era
hermoso
bajo el sol
de California.
Después sonó la campana del recreo
y todos esperábamos
la diversión.
Entonces la señora Sorenson nos
dijo:
"ahora lo que vamos a hacer
es contarnos
unos a otros lo que hicimos
durante la tormenta.
Vamos a empezar
por la primera
fila y después con las siguientes
Michael, tú empiezas."
Bueno empezamos a contar
nuestras historias. Michael empezó
y siguió otro y después otro,
enseguida nos dimos cuenta de que
todos estábamos mintiendo, no
exactamente mintiendo, algún chico
empezó a reírse y alguna chica
empezó a lanzar
miradas aviesas y
la señora Sorenson dijo:
"Bueno
¡Un poco de silencio!
A mí me interesa lo que
hicieron
durante la tormenta
aunque a ustedes
no."
Así que tuvimos que contar nuestras
historias, y eso si que eran
historias.
Una nenita dijo que
cuando salió el arco iris
la primera vez
había visto el rostro de Dios
en uno de los extremos.
Pero no explicó
en cual.
Un nene dijo que había sacado
la caña de pescar
por la ventana
y había sacado un
pescadito
y se lo había dado a su
gato.
Casi todo el mundo contó
mentiras
la verdad era simplemente
demasiado espantosa y
embarazosa
de contar.
Y después sonó la campana,
el recreo
había terminado.
"Gracias", dijo la señora
Sorenson, "estuvo muy
bien,
mañana el patio
estará seco
y podremos utilizarlo
de nuevo"
La mayoría de los chicos
aplaudió
y las nenitas
siguieron sentadas
derechas,
quietas,tan lindas,
limpias y
atentas,
con sus cabellos hermosos
bajo un sol que
el mundo
no volvería a ver jamás.

6/5/08

DESPROVISTO DE ESENCIAS, nuevo poemario de Rafael Saravia



Rafael Saravia ha publicado en la Editorial Renacimiento nuevo libro: Desprovisto de esencias. Os invito a que vayais por las librerías del mundo solicitándolo y lo echéis un vistazo.

Desprovisto de esencias se presentará el día 8 de mayo en León en el ILC ,Biblioteca Mariano Berrueta, a las 20:30h. (Presentación a cargo de Tomás sánchez santiago), el día 4 de mayo en Valladolid (Feria del Libro) a las 12:00h - Pabellon de cristal (presentación a cargo de Rut Sanz), el día 20 de junio en la Biblioteca Regional de Murcia a las 20:00h (Presentación a cargo de fulgencio Martínez).

Sobre esta nueva propuesta poética Alberto R. Torices ha hecho la siguiente reseña:

«Creemos que la correspondencia "íntima", tan delicada siempre, ha desaparecido al tiempo que los buzones se han ido llenando de publicidad, facturas, sorteos fabulosos en los que hemos resultado ser los agraciados... Y comprobamos con desolación lo mucho que hay que hurgar entre el spam hasta dar con un remitente conocido. Pero las cartas al amante, al padre, al imprescindible enemigo, siguen escribiéndose, quizá de manera más apremiante que nunca. Tan sólo hay que buscarlas en otros lugares, con otros ojos: en muros, flyers, espaldas tatuadas, lazos y pañuelos virtuales, poemarios inéditos...

Desprovisto de esencias compila la correspondencia íntima y "selecta" de un autor que probablemente dejó hace mucho de estampar sellos, más preocupado -esto es seguro- del rigor de los mensajes que emitía que de su eventual recepción. Y el rigor, no sólo en la escritura, tiene siempre la misma consecuencia estética: la forma poética; y la misma reglamentación ética: la condensación y la exactitud consustanciales al poema. Y como en toda correspondencia, también en ésta caben muchos géneros: el orden del día, el acuse de recibo, el parte de defunción; el resumen de gastos y cobros, de préstamos y deudas; la declaración de guerra y la bandera blanca. Así, cada uno de los poemas de este libro certifica lo vivido en los distintos órdenes en que se vertebra y consume una vida: el amor y la amistad, el placer y el trabajo, el dolor y la ambición, la memoria y el discurrir hacia la muerte. Nada más lógico que el autor, nuevo Herzog, concluya su tarea y se perciba desprovisto de esencias, que es tanto como decir libre de cargos o fuera de juego. Y acaso feliz.»

Y un botón de muestra:
CARTA DE GASSAN KANAFANI A TEODOR HERZL EN JULIO DE 1972

Hermano;
El desconsuelo no ata sino a una tristeza mayor;
una vara siempre será medida por otra que la contenga y así,
en el múltiplo imposible de la nada,
nos desahuciamos los unos a los otros
en el intento vano de reproducirnos con sangre de nuestro semejante.
Para más datos:
ISBN......................: 978-84-8472-388-2
Autor......................: SARAVIA, Rafael.-
Formato.................: medidas: 17x24 cms. páginas: 72 pgs.
Editorial.................: Renacimiento, Col. Calle del Aire, nº 92
Edición...................: Sevilla
Publicación............: 2008, 1ª ed.